La revitalización de nuestras raíces a través de una experiencia única

Con el propósito de conjugar el arte y la gastronomía como puntos focales de cultura, el Banco Itaú realizó una experiencia única para sus clientes de Personal Bank, donde los mismos disfrutaron de un momento de conjunción del arte culinario paraguayo, con otras formas de representación artística nacionales.

 

A través de esta acción, el Banco Itaú presentó a su cartera de clientes exclusivos la primera edición de Maridaje de Autor, con el fin de promover  proyectos culturales que ayuden a revivir lo nuestro.

 

“Sabores de nuestra tierra” es una propuesta diferente, basada en experiencias sensoriales, donde los clientes disfrutaron, revalorizaron y redescubrieron nuestras formar de representación artística a través de la música expresada con percusiones y arreglos, la gastronomía, el arte en barro y la arquitectura, en una perfecta amalgama del chef Ignacio Fontclara y el arte natural a través del barro en las manos de Julia Isidrez.

 

La noche tuvo una cálida bienvenida con las palabras de José Britez, Superintendente de Banca de Consumo del Banco Itaú, quien recalcó el compromiso de la entidad bancaria en incentivar y revitalizar la cultura paraguaya a través de esta novedosa propuesta.

 

Las palabras siguieron por parte de Ignacio Fontclara, quien dio a conocer su amor hacia lo que hace y los giros inesperados que tuvo su vida para concluir en el trabajo que realiza hoy. Expresó que lo importante es el camino por donde se transita, independiente del resultado, y también resaltó que tanto él cómo Julia Isidrez, trabajan con la tierra paraguaya.

 

Por otro lado, Julia isidrez realizó un profundo agradecimiento a todos los presentes, a su madre por haberla inducido al camino donde está hoy, al Banco Itaú por revalorizar el arte nacional y a Claudia Bobadilla gerente de marketing del Banco por promover este tipo de iniciativas.

 

Casa Bicentenario Augusto Roa Bastos

La Casa del Bicentenario Augusto Roa Bastos, sitio donde se realizó el evento, combina arte natural en el espacio. La edificación está catalogada como «de valor arquitectónico, por la riqueza decorativa y de detalles en fachada, así como también por los detalles constructivos y ornamentales internos.

 

Con esta acción, el Banco Itaú desea rescatar no solo las exquisiteces gastronómicas tradicionales con un toque moderno, sino también desea revitalizar a los artistas contemporáneos desde lo que saben hacer, demostrando el talento de quienes se dedican por completo al arte, comprobando la riqueza de sus obras y su significado.

 

 

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