Paraguayos temen al contagio, pero también a falta de dinero y educación de sus hijos

Crédito columna: Nauta. www.nauta.com.py

Realizamos una encuesta a nivel nacional para conocer más sobre la opinión de los paraguayos en torno al COVID-19, sus consecuencias y principales preocupaciones. A un año del inicio de la pandemia en Paraguay, el comportamiento de las personas ha ido modificándose por etapas hasta llegar al escenario actual.

Por un lado, realizamos la siguiente pregunta a los encuestados: ¿Qué tan probable creés que vos o algún miembro de tu familia se contagie del COVID-19? Y si bien casi un 40% menciona que es muy probable que él mismo o un familiar contraiga el virus, otro 34% menciona que cree poco probable o nada probable contagiarse.

¿Qué nos quiere decir esto? El comportamiento de ambos grupos ante las medidas de protección pueden ser distintas. Una persona que considera muy probable que alguien de su familia se contagie, posiblemente tome mayores medidas para protegerse. Sin embargo, alguien que no considera el peligro, puede relajarse más con los cuidados, exponerse más en lugares públicos con otras personas o no usar siempre un tapabocas.

También consultamos a las mismas personas lo siguiente: ¿Cuáles son las principales preocupaciones que tenés actualmente ante el contexto de la pandemia? 6 de cada 10 personas respondieron que él/ella o alguien de su familia se contagie de coronavirus, y otras 5 de cada 10 manifiestan que temen ser los transmisores del virus en sus círculos.

Por otro lado, están otras preocupaciones como perder el trabajo, la educación de sus hijos ante todo el debate del regreso a clases presenciales o la modalidad virtual, o que no alcance el dinero para sobrevivir el día a día.

Si bien la preocupación por el virus sigue vigente en primer lugar, también está muy presente otras situaciones que tienen que ver con la subsistencia de las personas que se vieron afectadas por las consecuencias generadas por las medidas para evitar contagios masivos: la pérdida de empleos, la desaceleración de la economía, la incertidumbre en la educación escolar, entre otras.

Siempre están las dos caras de la misma moneda y eso es lo que demuestra el comportamiento que tiene la ciudadanía, se ve reflejado claramente en los datos: quien no teme al contagio, quien tiene como principal preocupación el contagio, por eso estamos en este círculo de contagios constante que no disminuye pese a todos los pedidos de concientización.

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