Durante el 2020, el 68,5% de los hogares reportaron que algún miembro de la familia registró pérdidas en sus ingresos

La pandemia ha afectado fuertemente el funcionamiento de la economía en Paraguay con consecuencias en la caída del Producto Interno Bruto (PIB), los ingresos tributarios, cesantía laboral y disminución de los ingresos, entre otros.

El Banco Central del Paraguay (BCP) estimó una caída de -3,4% del PIB en 2020 (que luego resultó en una caída del -0,6% para final del año), los ingresos tributarios disminuyeron -11,7%, acumulado a agosto 2020 (Ministerio de Hacienda), la pérdida del trabajo o fuentes de ingresos afectó al 37,8% de los hogares y el 68,5% de los hogares reportaron que algún miembro del hogar registró pérdidas de sus ingresos (DGEEC, EPHC, agosto 2020).

Esta situación habría provocado además una caída del consumo, frente a una alta volatilidad de los precios de los alimentos que caracterizó a los meses iniciales de la pandemia.

La protección social en Paraguay es muy limitada, el 24,2% de la población accede a la seguridad social y 25,4% a programas mínimos de protección social como las transferencias condicionadas de Tekoporã y la Pensión de Adultos Mayores, con una cobertura del 23,9% para la población en condición de pobreza (DGEEC, EPH 2018).

Ante esta situación, el gobierno de Paraguay tuvo que reforzar los programas antes mencionados e implementar otros como el de Ñangareko y Pytyvõ, orientados a los trabajadores informales (65,2% de las personas ocupadas), así como el subsidio por cesantía laboral para los trabajadores formales.

SEGURO DE DESEMPLEO

La situación provocada por la pandemia de COVID-19 en Paraguay nos muestra la urgente necesidad de una ley de seguro de desempleo en el país.

La misma debe garantizar fondos de cobertura para trabajadores, sostenidos con aportes tripartitos del Estado, del sector empleador y el sector trabajador, según un análisis de Cadep.

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