El BCP confía en que la inflación en Paraguay cederá

El Banco Central del Paraguay inició la normalización con la suba de la tasa de política monetaria en agosto, buscando controlar la suba de precios observada y mantener anclada la expectativa de inflación en el horizonte.

“Los datos muestran que la mayor parte del tiempo, desde el 2011, la inflación estuvo dentro del rango objetivo, lo que nos da confianza”, sostuvo Humberto Colmán, miembro titular del directorio del BCP.

PLUS: ¿Cuáles son los mayores desafíos que debe enfrentar el BCP en 2021?

Humberto Colmán: Con la previsión de crecimiento económico para este año de un 4.5% y quizás hasta un poco más, y en 2022 a niveles más próximos a la tendencia, cercano al 4%, deberíamos ver una normalización de la política monetaria y financiera.

Esperamos que el proceso sea suave y que permita la continuidad del crecimiento de los créditos y depósitos, esperando que el sistema financiero se mantenga estable, ofreciendo cada vez mejores servicios a la ciudadanía. Así mismo existen proyectos particulares que son muy importantes como avanzar en el sistema de pago Sipap operando 24/7, el proyecto de Ley de Inclusión Financiera, el certificado de depósito de ahorro electrónico, entre otros, que son desafíos que el Banco Central va seguir abordando hacia adelante..

El objetivo principal del BCP es lograr la estabilidad de precios, y en ese sentido seguir manteniendo la previsibilidad y estabilidad de los precios hacia adelante, teniendo ancladas las expectativas en torno a la meta.

PLUS: La inflación del mes de setiembre fue 6,4% interanual, por encima del rango meta del BCP. ¿Esta situación de suba de precios se mantendrá? ¿Qué puede hacer el BCP?

Humberto Colmán: Actualmente, luego de la deflación de los meses iniciales del gran encierro por el COVID-19 y ahora con un choque de suba de los precios internacionales de alimentos, energía y transporte, con disrupciones en las cadenas globales de suministro, hay una suba de la inflación en el mundo y en Paraguay.

Esperamos que estos choques externos se vayan disipando, aunque podría durar algunos meses, lo que puede tener efectos de segunda vuelta sobre los precios, que se suman a las presiones que podrían ocurrir con la recuperación de la economía y el consumo. Por todo esto, es importante apurar el ritmo de la de normalización de la política monetaria.

El BCP ha iniciado la normalización con la suba de la tasa de política monetaria en agosto, buscando controlar la inflación observada y mantener anclada la expectativa de inflación en el horizonte de política. Los datos muestran que la mayor parte del tiempo, desde el 2011, la inflación estuvo dentro del rango objetivo, lo que nos da confianza.

PLUS: ¿Por qué Paraguay fue la economía que menos cayó en 2020 en América Latina? ¿Cuál fue la receta para contener el retroceso, en plena pandemia de COVID-19?

Humberto Colmán: Más allá de una receta, creo que existen dos factores importantes. En primer lugar, es necesario recordar que la gestión macroeconómica prudente que se tuvo en la última década y media (que se puede observar en los bajos niveles de inflación, deuda pública y los altos niveles de reserva, antes de la pandemia de COVID-19), generaron márgenes de maniobra tanto para el gobierno nacional, como para el Banco Central del Paraguay, que permitió desplegar una artillería de medidas para hacer frente a la crisis económica y social de la pandemia.

Sin ese espacio fiscal, las medidas de apoyo a las empresas y familias que realizó el gobierno en el marco de la Ley de Emergencia Sanitaria, no hubiera sido posible. El Ministerio de Hacienda inyectó 5,5% del PIB, unos 2.000 millones de dólares a la economía en 2020 a través de los distintos programas de asistencia que se implementaron.

Por otro lado, también la política monetaria y financiera crediticia tomaron medidas sin precedentes como la baja de la tasa de política monetaria en 325 puntos básicos, que es lo que más se ve. Pero, aun así, se tomaron otras medidas como las facilidades de liquidez con nuevos instrumentos como los créditos especiales, operaciones de reporto, reducciones en la tasa de encaje y otras medidas como la posibilidad de hacer cancelaciones anticipadas en cuanto a regulación monetaria y otros, sin profundizar en cuanto a las medidas del lado de la Superintendencia de Bancos en lo que respecta a las previsiones, renovaciones y reestructuraciones de créditos.

Todo esto tuvo una significancia muy importante. También la política monetaria inyectó con todas estas medidas un paquete total de más de 2.100 millones de dólares 5,7% del PIB.

Por otra parte, también es importante resaltar que la economía paraguaya no cayó tanto debido a que el año pasado vimos un buen desempeño del sector primario, especialmente en la agricultura que había tenido un año de producción récord en 2019, lo que atenuó bastante el impacto de la pandemia que se concentró mayormente en las zonas urbanas, en los sectores de servicios y en las mipymes.

PLUS: ¿Qué estrategia implementará Paraguay para apuntalar el crecimiento pospandemia?

Humberto Colmán: Desde el punto de vista de la política macroeconómica, en lo que resta de este 2021 y el 2022 tendríamos que observar una normalización tanto de la política fiscal como monetaria.

En el caso de la política fiscal, se encuentra un proyecto de ley en el Congreso y una gestión que está orientada a restablecer los niveles de resultado de déficit fiscal y bajar la deuda hacia adelante. En cuanto a la política monetaria también se inició el ciclo de normalización con dos subas de la tasa de política monetaria que actualmente está en 1,5% anual.

Entonces, esto debería sentar las bases para un crecimiento de la economía y la recuperación de las actividades de los diferentes sectores -especialmente el de los servicios- para lo que resta del 2021 y para adelante, en la medida que el plan Ñapu’a que tiene que ver específicamente con las reformas, y todo lo que tenga relación con calidad del gasto, la ley del servicio civil y la ley del sistema de compras de suministros, para permitir mayor eficiencia y recuperación, que viene siempre de la inversión privada.

PLUS: ¿Cuál es el rol que esperan del sector privado para la recuperación de la economía?

Humberto Colmán: El rol del sector privado es fundamental ya que es el principal motor de la economía. Lo que gasta el Estado por su parte, es importante especialmente en momentos como este, en los que el sector privado tiene cierta incertidumbre y posterga sus planes de gastos e inversión.

Entonces en ese marco, todo el trabajo realizado por el Estado desde el inicio de la pandemia fue indispensable para sentar las bases de la recuperación en la política contracíclica que representó un impulso muy significativo donde la inversión pública tuvo complementariedad con el sector privado.

Hay grandes oportunidades para la inversión privada, si nos centramos en la infraestructura con las posibilidades de concesiones y asociaciones público-privada, lo que permitiría que el sector privado pueda contribuir de una manera aún más importante al crecimiento de la economía.

PLUS: Paraguay tiene una gran deuda pendiente con el gasto público ¿Qué se tiene que hacer para mejorar?

Humberto Colmán: Entiendo que el Gobierno Nacional a través del Ministerio de Hacienda está abordado a este fin. En el caso del gasto público, así como en la región, existe cierta ineficiencia que pueden generar ahorros o permitir redireccionar recursos donde hay necesidades. En ese sentido, el tema de compras públicas es posiblemente uno de los espacios donde hay más posibilidades, así como lo que tiene que ver con el servicio civil que al mediano y largo plazo puede generar ciertos ahorros.

En cuanto a la inversión pública, se espera lograr alianzas público-privadas y concesiones que permitirán ser más eficientes en cuanto a la asignación de recursos de la deuda hacia la inversión y permitirá focalizar más hacia aquellos proyectos que probablemente no tienen una rentabilidad de mercado..

Sin embargo, no es un tema fácil, es una realidad que se trata en el proyecto del Presupuesto General de la Nación (PGN), y en ese sentido, el presupuesto lo que hace es tratar de ser cada vez más eficiente en el margen, por las restricciones que significan los gastos rígidos.

PLUS: ¿Cuál es el plan para ir reduciendo el déficit fiscal (incrementado al 6% por la pandemia) y en qué periodo se estima lograrlo?

Humberto Colmán: El Ministerio de Hacienda presentó el plan de reducción gradual del déficit fiscal donde la idea es llegar a un déficit del 4% este año y seguir reduciendo en los siguientes años hasta converger al 1.5%.

Es ese sentido creo que es muy importante el proyecto del Presupuesto General de la Nación de este año 2021, para no cargar nuevos gastos rígidos. Claramente hay demandas que vienen de ciertos ámbitos como educación y salud que están plenamente justificados, pero este no es precisamente un buen momento para que puedan darse aumentos de salarios.

Para ello es necesario que el fisco -luego del gran esfuerzo que se hizo el año pasado- pueda restablecer su equilibrio lo más rápido posible, lo que va ser importante para las expectativas y la confianza de los inversionistas, así como para el crecimiento de la economía en general. En esa misma línea considero que las medidas que se plantearon de control estricto del gasto corriente para reducir el déficit en los siguientes años, son muy adecuadas.

PLUS: ¿Qué le falta a Paraguay para llegar al grado de inversión?

Humberto Colmán: Por las conversaciones que tuvimos en varias oportunidades con las agencias calificadoras de riesgos, inversionistas y organismos internacionales; los aspectos que siempre se señalan tienen que ver con seguir fortaleciendo la institucionalidad y la gobernanza del país.

En ese marco, las instituciones son claves, y estas reformas que mencionaba antes son indispensables, de manera tal a que se vaya generando mayor capacidad del Estado en otros aspectos, como la lucha contra la evasión de impuestos, el crimen organizado, lavado de dinero y demás, que son áreas donde se ha hecho mucho esfuerzo, que seguramente va empezar a tener algún impacto, pero en general cuando uno habla de institucionalidad el termino es muy amplio y tiene que ver con tener instituciones estatales más eficientes en la prestación de bienes y servicios.

Asimismo, es muy importante el plan de convergencia fiscal y la normalización de las políticas macroeconómicas, puesto que la forma en cómo salimos de estas políticas contra cíclicas  también será monitoreado por las agencias para la calificación soberana.

PERFIL – HUMBERTO COLMÁN

Miembro titular del directorio del Banco Central del Paraguay (BCP).

Director de Política Macro Fiscal (2014–2017), viceministro de Economía (2017–2020), docente universitario.

Economista por la Universidad Nacional de Asunción. Ha cursado estudios de posgrado en macroeconomía aplicada en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde se graduó con votos de distinción.

Es docente universitario de macroeconomía en la carrera de economía de la Universidad Católica Nuestra Señora de la Asunción. Ha publicado documentos de investigación, artículos de revistas, capítulos de libros, todas en el área de macroeconomía aplicada.

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