A través de la pensión alimentaria para adultos mayores, durante el 2013 el Estado distribuyó USD 78 millones en los estratos más pobres de 243 municipios del país. Esta inversión social supera en un 92% el monto redistribuido el año anterior, que fue de un poco más de USD 40 millones, según un informe de la Dirección de Pensiones No Contributivas (DPNC) del Ministerio de Hacienda, encargada de administrar la pensión.
La asignación del Programa de Adultos Mayores en sus inicios superó los USD 233 mil y se desarrolló como plan piloto en los bañados de Asunción durante los tres últimos meses de 2010, y solo benefició a 909 personas. En el 2011, esta inversión ya alcanzó los USD 8,7 millones y se extendió a un total de 25.000 adultos mayores. Mientras que en el 2012, se distribuyeron USD 40,6 millones entre 50.000 personas.
En total, a diciembre de 2013 los beneficiarios suman 94.216 y la inversión social alcanza ya los USD 127,7 millones en 41 meses de ejecución del programa.
De esta manera, a través de la pensión alimentaria el Estado contribuye a que poco más de 94 mil adultos mayores abandonen el rango de extrema pobreza en la que viven, destinando un pago mensual de G. 414.558, lo que en promedio representa G. 13.819 ó USD 3 diarios por beneficiario.
Este ingreso mínimo está dirigido a la satisfacción de las necesidades esenciales de los adultos mayores, medido por el costo de una canasta básica de alimentos, que actualmente oscila los G. 343.212 para el sector metropolitano y G. 243.721 para el rural, según la Encuesta Permanente de Hogares 2011, de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (DGEEC).
Fuente: Ministerio de Hacienda.
