* El banquero Conor McEnroy, presidente del Sudameris Bank Paraguay, repasa en esta entrevista publicada en la edición impresa de Revista PLUS; el potencial del país y sus cualidades como un destino seguro para cualquier inversor. Además, la urgente necesidad de reformar las previsionales, las nuevas regulaciones del sistema financiero y la potencialidad de la oferta crediticia.
PLUS: ¿Cuáles son los principales riesgos del sector?
Conor McEnroy: Las flaquezas del sistema financiero son principalmente la falta de supervisión de los fondos previsionales y la ausencia de un mercado secundario en la bolsa de Asunción.
Pero por otro lado, es importante destacar que Paraguay logró tener una silla como nuevo miembro del Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) –es decir, entre los países serios del planeta- esto es un logro importantísimo que los paraguayos todavía no dimensionan. Además estamos a un paso de lograr el ‘investment grade’.
Si sumamos estos dos últimos puntos y le agregamos la regulación de las previsionales, les aseguro que Paraguay tendrá un sólido crecimiento económico por lo menos por 15 años en el futuro.
Y vuelvo a insistir. La reforma más urgente, más importante y más impactante es de los fondos previsionales. El ahorro para la jubilación es la cuenta de oro del pueblo. Es imperdonable que no haya alguien supervisando. Y recuerda siempre: la autoregulación no funciona.
PLUS: ¿Cuál es su análisis de la oferta crediticia para 2017?
Conor McEnroy: Los bancos en la plaza local están muy líquidos. Si existen buenos proyectos, el sistema bancario paraguayo tiene la capacidad actualmente de desembolsar US$ 2.000 millones más a la economía para proyectos privados.
Les digo a los empresarios que si tienen un buen proyecto, hoy es un buen momento para acercarse al banco y solicitar financiamiento.
Pero debemos remarcar que los bancos no están obligados a prestar ya que lo primero que deben cuidar es el depósito de sus clientes. Para prestar, el proyecto debe ser bueno. El crédito no es un derecho, el crédito es un privilegio.
PLUS: ¿Y los préstamos a más largo plazo?
Conor McEnroy: Los bancos aman otorgar créditos a largo plazo, como el crédito hipotecario. Actualmente existen tasas de interés muy ventajosas.
Pero los empresarios de la construcción deben apuntar donde está el mercado, ya que existe un gran déficit de viviendas para la clase media. El negocio no está en la casa de 250 mil dólares. El mercado está en viviendas de 90 mil dólares.
Las empresas constructoras se deben focalizar en esta demanda insatisfecha, para que los bancos puedan otorgar las hipotecas. Solo necesitamos que exista oferta en ese rango de precios, dirigida a familias de ingresos medios.
Pero para esto es fundamental que los empresarios sean más eficientes en costos y aprendan el sistema de construcción industrializado. Es decir que todo esté estandarizado para que al finalizar la obra la vivienda sea más barata, para el cliente que va a comprar su casa con la hipoteca.
PLUS: ¿Cómo califica el desempeño del banco el año pasado?
Conor McEnroy: Tanto para el banco -como para el sistema- el año pasado fue de ‘clean up’. Nuestro desempeño en 2016 fue muy respetable teniendo en cuenta las circunstancias que habíamos tenido. Mirando los objetivos que nos habíamos propuesto a principios de año, estoy muy contento.
En ese sentido quiero recordar que el índice de crecimiento de la cartera de Sudameris desde 2004 hasta 2014 fue altísimo. Había años que crecimos 35%. Es como manejar un Fórmula 1. El sistema bancario también creció como una bestia por 10 años. Pero ese ritmo de crecimiento solo se puede mantener por cierto tiempo. Luego hay que ir ‘slow down’.
Y en lo que se refiere a 2017, pienso que el periodo de consolidación de lo que hemos crecido y el reordenamiento de la casa, ya finalizó. Incluso el año pasado, el anterior gerente general de Sudameris (Gustavo Cartes) decidió dar un paso al costado para empezar un proyecto propio. Entonces aprovechamos para hacer un nuevo equipo para lanzar el banco al futuro.
Y la primera tarea del nuevo CEO (Jerónimo Nasser) es duplicar el tamaño de Sudameris Bank, ya sea de manera orgánica o inorgánica.
PLUS: ¿Cómo está posicionado el banco en la plaza financiera local?
Conor McEnroy: Está dividido en tres tipos de clientes: empresas, pymes y personas. Tenemos un gerente a cargo de cada uno de estos negocios. Y de cierto modo, es tener tres bancos en uno. Las necesidades y el modo en que tratas con los clientes son diferentes en cada segmento.
En la banca corporativa nos encontramos muy bien posicionados.
En pymes estamos en una fuerte etapa de desarrollo, tenemos ambiciosos planes para este segmento. Porque al final del día, la economía se mueve gracias a las empresas medianas, son las que más fuentes de trabajo ofrecen y generan mayor actividad.
En personas, estamos trabajando muy fuertemente para ofrecer una oferta válida.
A mi parecer, cuando hablamos de empresas grandes, algunas tienen mucho impacto en la economía y muchas tienen cero impacto en la economía.
Por esta razón en el futuro los negocios más importantes en los que nos enfocaremos desde Sudameris son la banca pymes y la banca personas.
PLUS: ¿Cuáles son los desafíos que enfrentarán los bancos?
Conor McEnroy: En primera instancia debemos seguir trabajando en bajar los costos operativos y lograr que las transacciones sean mucho más rápidas para los clientes. Seguir invirtiendo en tecnología y la utilización de teléfonos celulares inteligentes para realizar todo tipo de operaciones, en cualquier lugar.
PLUS: ¿Cómo impactó la ley de tarjetas de crédito a su negocio?
Conor McEnroy: Nuestro banco nunca fue de cobrar altas tasas de interés en tarjetas de crédito. Cuando el sistema cobraba un tasa de 60% con una inflación de 3%, algo no cuadraba. Las tasas de interés para las tarjetas de crédito deben ser de 35%. En un nivel de 18% (que está actualmente) tampoco es correcto.
Lo lamentable de esta historia es que el Congreso fijó precios en el mercado. Yo nunca estuve de acuerdo con las tasas de interés en 60%. Pero esta ley perjudica a los clientes, pues la cantidad de plásticos se va a seguir reduciendo drásticamente.
PLUS: ¿En qué situación se encuentra actualmente el sistema financiero en materia de solvencia?
Conor McEnroy: La banca en Paraguay es súper solvente, a la altura de países desarrollados. Hoy día los bancos están muy bien controlados, capitalizados y líquidos. El sistema financiero paraguayo es por lejos más solvente que bancos de EEUU o bancos europeos.
PLUS: ¿De qué negocios provienen sus principales ingresos?
Conor McEnroy: Los bancos ganan de dos fuentes. Por la intermediación de tasas de interés y por las comisiones que cobran. El sueño de los bancos es que por cada dólar que gana por intermediación; también gane 1 dólar por comisión. Pero realmente los bancos ganan más dinero mediante la intermediación financiera.
© Revista PLUS. Asunción (Paraguay) Marzo 2017.- 
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