Las redes sociales ¿tienen los días contados?

Crédito: Alexandre Scuderi, director general Evoluado @AlexScuderi www.evoluado.com 

* Columna publicada como parte de la nota de tapa de la edición impresa de Revista PLUS Febrero 2018.

Asunción (Paraguay) – Si uno es lo que consume, ¿en qué nos estamos convirtiendo los usuarios de redes sociales?, ¿en seres encapsulados carentes de reflexión que viven en burbujas? ¿Es este el inicio del fin de nuestra (hoy día) principal fuente de información?

La interrogante pareciera ser en parte paranoica y a la vez extraída de un episodio de Altered Carbon, serie de Netflix, en donde las conciencias de las personas pueden cambiar indistintamente de fundas o cuerpos humanos, pero no es del todo ajena a la realidad.

Es lo que a simple vista podemos observar, en un intento por analizar la lucha del titán de las redes sociales Facebook ante la bola de nieve de las demandas recibidas por manipular las noticias que aparecen en el newsfeed de los usuarios y el impacto negativo que está teniendo la plataforma que empezó con la intención de conectar amigos y compartir ideas.

Parte de la desinformación e infoxicación en las redes está motivada por la ideología, pero en gran medida por el incentivo económico que el mismo Facebook ha creado, puesto que las cosas falsas, cuando conectan con las nociones preconcebidas o el sentido de la identidad de un usuario, se propagan como un fuego descontrolado. Así lo cree el periodista e investigador de Nieman Lab, Joshua Benton.

Existe una corriente que sostiene que no es Mark Zuckerberg el responsable, el autor del monstruo de Frankeinstein en el que se convirtió su obra prima, que tampoco lo son sus logaritmos ¿Entonces quién? Sos vos mismo, porque vos determinás qué contenidos preferís consumir ante toda la ola de publicaciones que las redes sociales te ofrecen día a día. Mientras mayor sea tu preferencia por consumir contenido de mala calidad, mayor será la exposición que tendrás de éstos.

Afín a esta teoría, el magnate húngaro George Soros fue aún más tajante y afirmó hace unos días en una cena con periodistas en el marco del Foro Económico Mundial que los días de Facebook y Google están contados y cuestionó el poder de las empresas tecnológicas de Estados Unidos, acusándolas de ser una “amenaza para la democracia”. Asimismo, añadió que “estas compañías sostienen que simplemente distribuyen información. Pero el hecho de que son casi monopolios las vuelve compañías de utilidad pública y debería obligarlas a un control más estrecho, para defender la competencia, la innovación y un acceso universal”.

Pero, realmente, ¿es del todo cierto que el principal responsable de esta desinformación en las redes es la misma red? ¿Es víctima y victimario?

En ese sentido, la investigadora española Mari Luz Congosto expresa que Facebook solo te muestra una versión de los hechos, que luego se refuerza y por ende se radicaliza. Y la verdad, creemos que tiene algo de razón. Por otro lado, la abogada guatemalteca y defensora de los derechos digitales Renata Ávila destaca que las cosas cambiaron, ya no sos vos quien ingresa a internet en busca de un dato específico, es internet quien llega a vos mediante el algoritmo.

Las causas probables de tal giro, según la experta, son los siguientes:

– El modelo de negocios orientado a la experiencia mobile, específicamente hacia a las apps.

– El contenido burbuja enviado o compartido por tus amigos.

¿Qué alternativas existen para reducir lo que muchos ya están denominando el efecto Facebook?

– Una opción podría ser retocar o etiquetar el  contenido seleccionado.

– Otra, reconfigurar algoritmos.

– Pero si hablamos de perder ingresos de publicidad ¡Jamás! ¡Ni pensarlo!

Toca hacer el siguiente planteamiento: 

En un contexto en el que el gigante de las redes parece desmoronarse, ¿existen alternativas para los usuarios? Algunos sostienen que es muy difícil derribar a un gigante, pero no olvidemos que alguna vez existió un tal David. No obstante, ¿cuál es la competencia real de Facebook? 

– Facebook – ¿Twitter tal vez? Sin embargo, el escritor español Lorenzo Silva explica en un post que Twitter le permitía expresarse con agilidad y puntualidad en asuntos que le interesaban, ponía a prueba su capacidad de condensar el pensamiento y recibía no pocas respuestas cálidas y estimulantes, útiles y esclarecedoras aun desde la discrepancia. Aun así, decidió dejar de realizar publicaciones en la plataforma. Abandonó la red social el pasado 2 de enero.

Aunque para cada idea, existe una contra idea, vale la pena rescatar el decálogo de los 10 motivos por los que la periodista Carmela Ríos elige permanecer en Twitter, entre los tantos motivos que expuso, mencionó que, en la era de la desinformación, no es posible detectar o combatir las noticias falsas sin conocer su  ecosistema natural, internet y las redes sociales, ni sin aprender herramientas de verificación. Y esta es una obligación de los periodistas.

Más bien creemos que podría ser Vero, plataforma que calificaron como un híbrido a medio camino entre Instagram y Facebook que cuenta con un muro en el que el usuario puede subir fotos, lugares, recomendar libros o películas ¿Funcionará? Solo el tiempo responderá este planteamiento.

También pensamos en las adquisiciones más ambiciosas de Zuckerberg, a mencionar, Instagram y Whatsapp.

– Instagram – 500px. Sus mismos creadores expresan sobre la misma, que es una plataforma que expresa en su manifiesto que sus usuarios son desde fotógrafos de dispositivos móviles hasta profesionales y que la misma tiene los productos y las características para llevar tus fotografías al próximo nivel. Tenemos nuestras dudas, pero, al igual que con Vero, solo el tiempo lo decidirá.

– Whatsapp – Telegram. Uno de los golazos de esta plataforma frente a Whatsapp, es que cuenta con la posibilidad de agregar a una misma cuenta de Telegram hasta tres números telefónicos (versión para Android) e intercambiarlos entre sí cuando el usuario así lo prefiera, o que permitió incluso antes que Whatsapp, compartir una ubicación en tiempo real, por tan solo mencionar algunas de sus ventajas ante su principal competidor. Claro, no muchos lo saben porque prefieren utilizar herramientas más afines al jefe. Pero, cuando cae Whatsapp, bien que te creás una cuenta de Telegram. Podríamos permanecer horas haciendo elogios sobre sus stickers y la facilidad para crearlos, entre otras virtudes más, pero podríamos hablar de ello en otra ocasión.

Aunque, volviendo a la tesis de Lorenzo Silva, tal vez sea el momento del coma inducido social mediático, eliminando las cuentas de redes sociales –o suspendiéndolas por un momento para oxigenar nuestra mente– para retomar contactos reales, conversaciones reales, momentos reales que nunca podrán ser reflejados en esa selfie que compusiste con tanto esfuerzo.

Silva expresó en su despedida de las redes que ya no se irán sus horas (o minutos) en la interacción empobrecedora con embozados que generan audiencia a la plataforma de otros, y por ende valor económico para ellos, “pero merman la calidad de mi existencia y no aportan nada a mi espacio de conocimiento y creación, que es donde prefiero que suceda, como ya empecé haciéndolo en el año 2000”, su propia y personal red social.

Y secundando de alguna manera la medida tomada por el escritor, el ensayista y novelista francés Michelle Houellebeck, menciona que cada individuo tiene sin embargo en su mano producir en sí mismo una suerte de revolución fría, situándose por un instante al margen del flujo informativo-publicitario. Es muy fácil de hacer; incluso nunca fue tan simple como hoy adoptar, en relación al mundo, una posición estética: basta con dar un paso a un lado.

Oh, y ahora ¿quién protegerá nuestros datos?

En ese sentido, en Europa, pese a tener presente que la legislación avanza más lentamente que la tecnología, desde mayo de este año pondrán en vigencia el reglamento europeo de protección de datos. Dos ejemplos claros de empresas a las que aplica el nuevo reglamento son:

– Amazon, que vende y entrega a domicilio productos en Europa, entre otros servicios.

– Google Analytics, que ofrece servicios de monitorización o análisis del comportamiento de usuarios en páginas web.

Ninguna de las empresas anteriormente citadas reside dentro del espacio de la Unión Europea. La principal novedad de esta reglamentación radica en el consentimiento de los usuarios a realizar uso pleno de los datos proveídos, no de forma tácita como se viene realizando hasta hoy día, consentimiento que, debe comprobarse.

Por tomar un ejemplo, en los casos de tratamientos de datos sensibles como los biométricos, se exigirá una acción implícita y expresa, lo que garantiza la total transparencia en la administración que se darán a dichos datos.

Pero eso sucede en el otro lado del globo, en el sector europeo. En nuestra hermosa y sufrida tierra sin mar, aún hay mucha hierba que cortar y aún más por debatir. Sigamos esta conversación en nuestras redes sociales, o… no, como Silva.Revista PLUS 12 años: 2006/2018

Suscríbete hoy a la edición impresa por solo G. 490 mil por 12 meses y recibe nuestra revista en la comodidad de tu oficina u hogar.

Puedes hacerlo haciendo click en el siguente link: Suscripciones Revista PLUS

También puedes llamarnos al (595 21) 230 640/2; o enviando un e-mail a suscripcionesplus@revistaplus.com.py

Disfruta de toda la información de la revista de economía, finanzas, empresas y negocios más influyente de ‪#‎Paraguay desde el 25 de marzo de 2006.

Comentarios