A pesar del bajón económico, ¿Podrá Mario Abdo concluir su gobierno en 2023?

Se pincha el globo. Anatomía de una crisis política atizada por la recesión

La actual recesión afecta aún más la deteriorada imagen del presidente de Paraguay, debido a la lenta respuesta tanto en el reconocimiento de la situación económica, como en la elaboración de un plan que permitiera mitigar los efectos negativos que se venían percibiendo en varios sectores.

¿Podrá terminar Mario Abdo Benítez su mandato como presidente de Paraguay? Es imposible saber. Pero es sintomático y alarmante que en su primer año de gobierno, ya esté cojeando. Eso le hace cuesta arriba porque aún le quedan 4 años de gestión. Ya se acercan las internas municipales y elección en la Junta de Gobierno. Si sus candidatos pierden ante su adversario de Honor Colorado (Horacio Cartes), lo convertirá casi en un fantasma en el Palacio de López.

Cualquier disrupción, en especial de orden político, alterará de manera negativa la incipiente recuperación de la economía paraguaya. Para una sólida recuperación y sostener parámetros macroeconómicos estables, el Paraguay requiere de fortaleza institucional, predictibilidad y continuidad.

El riesgo de estabilidad política está instalado en el país desde la última crisis que convocó un pedido de juicio político al presidente y al vicepresidente de la República. La construcción de la mayoría parlamentaria que hoy sustenta al gobierno es frágil.

La continuidad del presidente Abdo Benítez depende de él mismo y sus circunstancias, de lo acertadas que sean sus decisiones, de que logre transmitir la confianza que la sociedad paraguaya espera del Ejecutivo y fundamentalmente de los resultados que sus políticas arrojen en materia de transparencia y calidad de gestión pública.

VACAS FLACAS

La dependencia de Paraguay del sector primario, en particular la agricultura, se ha convertido en el último año en un lastre para el crecimiento económico del país, que acumula dos trimestres negativos del PIB y una contracción del 2,5 % en el primer semestre, una recesión que el Ejecutivo se resistía a asumir, informó EFE.

El Banco Central del Paraguay (BCP) confirmó con cifras la nueva realidad, que hasta ahora era rebatida por el Ejecutivo con base en la estabilidad macroeconómica del país y a un pasado de desempeño positivo, muy destacado por los organismos internacionales.

Los últimos datos del BCP muestran una caída del 3% del Producto Interior Bruto (PIB) entre abril y junio, por debajo del 1,6% registrado el mismo periodo del ejercicio anterior.

“En este escenario, el desafío del Poder Ejecutivo y del Estado en su conjunto va a ser tener aprobado un presupuesto responsable que tenga financiamiento”, manifestó el ministro de Hacienda, Benigno López.

Además, López calificó el 2019 como un año particularmente duro como consecuencia de una reducción de más de US$ 200 millones en el apartado de ingresos del país.

Por su parte, el economista Manuel Ferreira Brusquetti explicó que, “En cuanto al PIB, en la segunda parte del año se vio un tímido mejoramiento en los datos de niveles de actividad y ventas pero esto no significa que el año cierre con un repunte en el crecimiento. En el mejor de los casos sería un crecimiento nulo. Hubo buenas lluvias, esto permitió que la siembra avance. Hay buenas perspectivas para el 2020, año en el que el Estado deberá gastar en obra pública y ahorrar en gasto corriente”.

A diferencia de otros años de caída del PIB, en este, el escenario internacional también está complicado. La guerra comercial, desaceleración mundial, brexit, además de la incertidumbre económica y política en Argentina y Brasil con un crecimiento prácticamente nulo.

Entre 2004 y 2017, Paraguay se benefició de los precios de las materias primas y de los granos, que le permitieron impulsar su economía, según datos del Banco Mundial. Sin embargo, ese historial fue insuficiente para frenar el impacto de la crisis regional, que ahora también se ha instalado en la economía guaraní.

Para el analista económico, Amilcar Ferreira, el primer semestre de 2019 fue muy difícil, sin embargo dijo que: “La economía empieza a mostrar señales de recuperación. Considero que este segundo semestre será un poco mejor que el primero, pero de todas maneras vamos a cerrar el año con cifras muy modestas. Creo que en 2020 se va dar una recuperación, con un crecimiento cercano a nuestro potencial de 4%”.

FRENO

Todos los sectores, a excepción de los servicios, registraron en el segundo trimestre del año un desempeño negativo, arrastrado de manera especial por la agricultura, la construcción y la electricidad.

La agricultura, que ya empezó a sufrir en los últimos trimestres de 2018, encadena caídas, con una reducción del 11,4% en el segundo trimestre de este ejercicio.

Para el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la razón está en los menores niveles de producción de la soja a causa de las condiciones climáticas adversas, como las fuertes lluvias que cayeron sobre el país desde comienzos de año.

Para el gobierno de Mario Abdo Benítez, la actual recesión tendrá un fuerte impacto en lo político. “Si hoy su gobierno está debilitado (no hace mucho, apenas salvó su cabeza por el escándalo del acta secreta de Itaipú), el actual escenario económico le puede desestabilizar aún más. El no superó totalmente la crisis política: ese es su talón de Aquiles”, analizó la periodista Estela Ruiz Díaz.

Además, ahora se viene el estudio del Presupuesto General de la Nación (PGN) y el panorama muestra un horizonte repetitivo: El Congreso se aviene a aumentar aún más los gastos rígidos; y el presidente, con su debilidad, no podrá imponer la pretendida austeridad que reclama Hacienda.

Para el economista y diplomático, Rubén Ramírez Lezcano, “El riesgo de estabilidad política está instalado en el país desde la última crisis que convocó un pedido de juicio político al presidente y al vicepresidente de la República. La construcción de la mayoría parlamentaria que hoy sustenta al gobierno es frágil. La continuidad del presidente Mario Abdo depende de él mismo y sus circunstancias, de lo acertadas que sean sus decisiones, de que logre transmitir la confianza que la sociedad paraguaya espera de él y fundamentalmente de los resultados que de sus políticas arrojen en materia de transparencia y calidad de gestión pública”.

PUNTOS DE ATENCIÓN

El Ejecutivo anunció a principios de junio de este año una inyección de US$ 1.543,51 millones para reactivar la economía en la última parte del año, con 1.175 millones de dólares destinados a la inversión en infraestructuras.

El informe Perspectivas Económicas Mundiales del Fondo Monetario Internacional (FMI), publicado en abril, rebajó las previsiones de crecimiento de Paraguay para 2019 del 4,4% al 3,5%. Por su parte, el BCP revisó esa cifra a la baja, con un crecimiento del PIB del 1,5% para este ejercicio.

“La crisis golpea con más fuerza a los más pobres, a aquellos que viven del día a día, no tienen reservas, la pobreza puede aumentar. Por otro lado, la caída de ventas afecta a muchas empresas, especialmente a las pymes, que enfrentan la posibilidad de cierre, se genera un mal humor social. Ante esto, es importante que la respuesta del gobierno sea rápida y con ideas muy claras, que ayuden a amortiguar el golpe”, indicó Amilcar Ferreira.

El contexto internacional recibido en 2018 por el presidente Mario Abdo Benítez no fue favorable. Se sumaron una menor producción de granos por el efecto climático, inundación, caída de las economías vecinas. Fue un arranque con casi todo en contra, muy difícil. Las perspectivas económicas en adelante van a requerir mucho diálogo público-privado y políticas inteligentes, agregó el analista económico.

RECETA ANTICÍCLICA

Ante este escenario, caracterizado por la contracción del producto interno bruto, así como la reducción de la inversión, el empleo formal y del consumo, la política obligada es emprender acciones que permitan reactivar la economía a partir de estrategias anticíclicas, sostuvo Rubén Ramírez Lezcano.

No obstante, se debe evitar cometer errores anteriores, así como los que adoptaron algunos países que establecieron medidas que contribuyeron a profundizar el deterioro de la economía, porque se priorizaron los compromisos de subsidios y empleo público para la sostenibilidad política, derivando en el endeudamiento insostenible.

Las políticas anticíclicas incluyen estímulos fiscales, como podría ser postergar la aplicación de la ley de reforma tributaria; incentivar el incremento de la inversión pública y privada (ley 5074 y ley app); el emprendimiento responsable, con el fin de promover el consumo; el apoyo a la inversión productiva; y satisfacer las perentorias necesidades de contraprestación de entrega de bienes y servicios públicos de calidad a los contribuyentes.

Además, el ajuste presupuestario inmediato ante riesgos de déficit excesivo y su corrección urgente, son medidas necesarias para alcanzar los objetivos de estabilidad y convergencia, y la abstención de atribuir el déficit a la contracción del PIB, cuando éste es hoy inferior o igual al -1,5% anual. El desafío principal es lograr un PGN 2020 equilibrado, con mejor calidad del gasto público.

“Es importante seguir creando espacios fiscales que nos permitan invertir, alcanzar la cifra de US$ 1.000 millones/año de inversión pública y mantenerla, una política fiscal expansiva con énfasis en la inversión y no en el gasto corriente, mantener tasas de interés bajas, una política crediticia mucho más activa con mayor fondeo y presencia de la banca pública, e impulsar medidas micro que mejoren el clima de negocios y nuestra competitividad”, agregó Amilcar Ferreira.

EL FANTASMA

Al ser consultada si cree que Abdo Benítez llegará a concluir su mandato en el 2023, la analista política Estela Ruiz Díaz refirió que es imposible saber. “Pero es sintomático y alarmante que en su primer año de gobierno ya esté cojeando. Eso le hace cuesta arriba porque aún le quedan 4 años de gestión. Ya se acercan las internas municipales y elección en la Junta de Gobierno. Si sus candidatos pierden ante su adversario de Honor Colorado (Horacio Cartes), lo convertirá casi en un fantasma en el Palacio de López”.

La recesión actual afecta aún más la deteriorada imagen del presidente de Paraguay, debido a la lenta respuesta tanto en el reconocimiento de la situación económica, como en la elaboración de un plan que permita mitigar los efectos negativos que se venían percibiendo en el sector comercio, construcción e industria, sostuvo Manuel Ferreira Brusquetti.

“Cualquier disrupción, en especial del orden político, alterará de manera negativa la incipiente recuperación de la economía paraguaya. Para una sólida recuperación y sostener parámetros macroeconómicos estables, el país requiere de fortaleza institucional, predictibilidad y continuidad”, finalizó el exministro de Hacienda de Paraguay.

Revista PLUS 13 años: 2006/2019

Suscríbete hoy a la edición impresa por solo G. 490 mil por 12 meses y recibe nuestra revista en la comodidad de tu oficina u hogar.

Puedes hacerlo haciendo click en el siguente link: Suscripciones Revista PLUS

También puedes llamarnos al (595 21) 237 6915; o enviando un e-mail a suscripciones@revistaplus.com.py

Celular: (0982) 100 265

Disfruta de toda la información de la revista de economía, finanzas, empresas y negocios más influyente de ‪#‎Paraguay desde el 25 de marzo de 2006.

Facebook / Twitter / Instagram / LinkedIn: @RevistaPLUSpy

Comentarios