Estamos seguros, que, si sigues todas estas estrategias, contarás con un equipo de trabajo motivado, que hará crecer enormemente el negocio y resaltará entre los mejores de la industria.
La pandemia no sólo nos ha dejado secuelas emocionales y físicas, sino que también, ésta ha afectado enormemente la economía y con ello, unos cuantos millones han perdido su empleo en los últimos meses.
Tras recortes y reajustes, inevitablemente, se quedarán los empleados que la empresa considera indispensable para el crecimiento del negocio, pero habrá que tomar en cuenta que (en un largo o corto plazo), un pequeño porcentaje de éstos, no se sentirá motivado del todo e incluso, renunciará por diferentes cuestiones.
De acuerdo con Dinero en Imagen, en 2019, un total de 222.879 personas renunciaron por situaciones de “insatisfacción laboral” durante el primer trimestre del año, por lo que, en estos tiempos de incertidumbre, habrá que preguntarse (aún más) qué estrategias son las más indicadas para retener a tus empleados.
1- SALARIOS Y BENEFICIOS COMPETITIVOS
De acuerdo con un estudio realizado por Glassdoor, plataforma que permite a los usuarios clasificar anónimamente a las empresas, 45% de los empleados que renunciaron fue por insatisfacción con su sueldo mensual (seguido por falta de oportunidades, pocos beneficios y ubicación).
Debemos recordar que, aunque no todo es dinero, una gran mayoría de los empleados tiene necesidades materiales que se ven obligados a satisfacer. Y aunque determinar lo que es un salario justo no es una tarea fácil, tendrás que esforzarte en dar a cada trabajador la valoración que se merece. Recuerda: Si un empleado cuenta con beneficios competitivos y un salario justo, éste se sentirá motivado ya que la empresa reconoce su valor y reconoce sus esfuerzos.
2- RETROALIMENTACIÓN Y ACTIVIDADES DE EQUIPO
En la “nueva normalidad”, una gran parte de los empleados trabajan desde casa y no ha visto a sus colaboradores “cara a cara” en un par de meses. Y ahora más que nunca, habrá que escucharlos y darles retroalimentación constante.
Ya sea mediante encuestas o una junta, escucha cuáles son sus frustraciones y busca maneras de resolverlas. Te recomendamos buscar empresas que se dediquen a hacer “Team Buildings” (vía Zoom o Skype) y hacer este tipo de actividades cada 2 – 3 semanas, esto fomentará el trabajo en equipo y se sentirán valorados por la empresa.
3- SÉ UN LÍDER, NO UN JEFE
Para ser un buen líder, hay que recordar las características que lo conforman.
Por un lado, hay que ser claros sobre el rumbo hacia dónde vamos. Los jefes no comparten información y dejan a los empleados en el abismo (sin saber realmente qué va a pasar con la empresa o con su puesto de trabajo).
Por otro lado, los líderes serán siempre capaces de manejar los desafíos que se les presentan en lugar de descargar intencional o involuntariamente el estrés en los empleados. Y no olvides, siempre inspirar confianza.
Los buenos líderes hacen que los empleados se sientan seguros de sus capacidades, los jefes tienden a inspirar frustración pasivo-agresiva cuando los empleados cuestionan las decisiones que se han tomado y los han afectado negativamente.
4- HAZ POSIBLE EL “AVANCE”
Por naturaleza, los humanos se guían por metas y objetivos. Te recomendamos siempre tener en mente el crecimiento de tus empleados (ya sea con una promoción o algún tipo de desarrollo profesional). Esto los mantendrá motivados y no se sentirán en un callejón sin salida.
“Las personas siempre tendrán un deseo de sentir que están teniendo éxito y que sus talentos y capacidades son utilizados de una manera que hace una diferencia en el negocio”, afirma Andrea Vargas, directora de la empresa mexicana Potentor.
