El sector manufacturero, previo al shock de la pandemia, se encontraba en pleno proceso de recuperación de sus niveles de producción luego de las intensas caídas experimentadas durante los años 2018 y 2019.
Durante el 2019, la actividad económica industrial se encontraba en pleno proceso de ajuste, causado por la incertidumbre y las tensiones causadas por la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
En este contexto, a inicios de 2020 nos encontramos con un shock únicamente comparable al ocurrido durante la Segunda Guerra Mundial, o la Gran Depresión del 1929, la pandemia del COVID-19.
A pesar que en algunas economías, han sufrido la embestida del shock del COVID-19 de manera temprana, y se encuentran en procesos de tratar de normalizar sus actividades, el consenso generalizado, es que será difícil recuperar los niveles previos de producción, y adicionalmente, consideran que el proceso de ajuste aún no ha concluido.
PARAGUAY
La configuración de un escenario económico internacional con caídas intensas en la producción y el comercio, ha golpeado de manera directa a la evolución de la actividad económica del país, según un reporte de la Unión Industrial Paraguaya (UIP).
Adicionalmente, las medidas de confinamiento (cuarentena) han obligado a la paralización de las empresas, pero es importante destacar que Paraguay se encontraba en pleno proceso de salida de una recesión en el 2019, causada por las malas condiciones climáticas, por ello, ya muchas empresas se encontraban en una situación financiera delicada.
En relación a la industria manufacturera de Paraguay, previo al shock del COVID-19 se encontraba en pleno proceso de recuperación de los niveles de producción luego de las intensas caídas experimentadas durante los años 2018 y 2019. Con todo, en el cuarto trimestre del 2019 el PIB manufacturero había crecido 3,4% a/a, pero al inicio del trimestre, ya con los primeros efectos de las paralizaciones el crecimiento fue de solo 0,3% a/a.
En el gráfico, tomando en cuenta la alta correlación entre el indicador de actividad económica (IMAEP) sin las actividades agrícolas y binacionales, y el PIB manufacturero, nos permite inferir la intensidad en que estaría afectando la crisis del COVID-19 a la actividad industrial de Paraguay.
A través de diversos indicadores, hemos observado una sincronización brutal en la caída en la actividad económica industrial de los países del mundo. La magnitud de la caída de producción, no se encuentra ligada a la magnitud de las medidas de confinamiento, ni tampoco con la intensidad de contagio del virus del COVID-19. Los factores que explican el ajuste en cada país pueden ser atribuibles a factores idiosincráticos, que colaboran a propagar el shock económico de COVID-19.
Sin embargo, la intensidad de la caída, y las expectativas de recuperación parecen estar ligados a la magnitud de la respuesta de las autoridades económicas, en aplicar medidas de incentivo a la demanda y la producción.
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