Nusa Dua (Indonesia), 7 jul (EFE).- El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, abordó este jueves en los márgenes de la reunión del G20 con los cancilleres de Argentina, Santiago Cafiero, y de Brasil, Carlos Alberto França, la situación del acuerdo de asociación UE-Mercosur, aún pendiente de ratificación para que pueda entrar en vigor.
“La invasión rusa de Ucrania estará en la agenda y será una buena ocasión para discutir sobre ello, los 20 miembros del G20, entre ellos el ministro ruso de Asuntos Exteriores”, Serguéi Lavrov, indicó Borrell en un vídeo a través de su perfil en Twitter, en referencia al principal tema que abordarán en esta reunión los ministros de los países más industrializados y emergentes.
A lo largo de la sesión plenaria del viernes se abordará la situación en Ucrania pero también “muchos otros asuntos multilaterales”, dijo Borrell, mientras que la jornada del jueves estaba dedicada, principalmente, a reuniones bilaterales.
Así, el jefe de la diplomacia comunitaria se reunió por separado con Cafiero y França, como comunicó a través de Twitter, con los que abordó el acuerdo entre la UE y el Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay).
Con el ministro argentino, Borrell habló además de la próxima reunión ministerial entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y del “impacto global devastador” de la guerra de Rusia contra Ucrania. y también de que están “comprometidos con la profundización de la relación bilateral”.
Por su parte, sobre la reunión con França, el exministro español señaló que Brasil es “un socio estratégico” con el que trató la situación en Ucrania y el “gran desafío” que supone la inseguridad alimentaria y la escasez de fertilizantes a raíz del conflicto lanzado por Rusia.
“Y seguimos comprometidos con hacer progresos sobre Mercosur”, apuntó.
Borrell abordó asuntos como la crisis alimentaria mundial derivada de la guerra en Ucrania y las relaciones con África con las ministras de Exteriores de Sudáfrica, Naledi Pandor, y de Senegal, Aïssata Tall Sally.
También se entrevistó con el ministro de Exteriores de Corea del Sur, Park Jin, con el que discutió la asociación entre su país y la UE, el reconocimiento mutuo de los certificados COVID y la estrategia indo-pacífica de la Unión, además de la situación con Corea del Norte y su alineación sobre la guerra de Rusia contra Ucrania.
Anteriormente, el alto representante se había reunido con el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, a quien solicitó que su país mantenga un papel «más constructivo» y detenga la desinformación sobre la guerra de Rusia en Ucrania.
Y con el ministro indio de Exteriores, Subrahmanyam Jaishankar, con quien abordó cómo ambas partes pueden asegurar que Moscú detenga esa guerra.
Los jefes de la diplomacia mundial comenzaron a llegar este jueves a Bali (Indonesia), que acoge entre este jueves y el viernes una reunión de ministros de Exteriores del G20 centrada en Ucrania y la crisis alimenticia y económica.
En una entrada en su blog, con motivo de esta cita, Borrell defendió la acción multilateral para hacer frente a retos comunes.
“Obviamente, el contexto geopolítico de la guerra de Rusia contra Ucrania está complicando esta tarea. Vemos un endurecimiento de las tensiones que se extiende a todos los foros multilaterales”, indicó.
En su opinión, “no cabe duda de que debemos defender nuestros principios y mantener los principios básicos del orden basado en normas frente a revisionistas desafiantes como Rusia y China”.
Al mismo tiempo, pidió seguir trabajando con todas las potencias para resolver los problemas mundiales en lo que llamó un “acto de equilibrio que requiere una constante puesta a punto y una estrecha coordinación con socios afines”.
“La reunión de los ministros de Asuntos Exteriores del G20 en Indonesia es un momento crucial para hacerlo, sobre todo en lo que respecta a la dramática crisis alimentaria y energética, pero también a las vacunas, el clima y todos los demás bienes públicos que tanto necesita nuestro mundo”, concluyó. EFE
