Shell subió sus beneficios hasta junio un 176,8 %, a 25.156 millones

Londres, 28 jul (EFE).- La petrolera Shell disparó sus ganancias un 176,8 % en el primer semestre de 2022, con un beneficio atribuido de 25.156 millones de dólares (24.603 millones de euros, al cambio actual), frente a los 9.087 millones de dólares (8.887 millones de euros) del mismo período en el año anterior.
La compañía vio cómo sus ganancias trimestrales crecían un 154 % y pasaban de 7.116 millones de dólares (6.971 millones de euros) en el inicio de año a 18.040 millones de dólares (17.674 millones de euros) de abril a junio, gracias al contexto de altos precios en el mercado de la energía motivado por la guerra en Ucrania.
Además, su facturación semestral pasó de los 120.559 millones de dólares (118.112 millones de euros) de los primeros seis meses de 2021 a 184.263 millones de dólares (180.492 millones de euros) del mismo período de este año, un 53 % más.
Los beneficios de los primeros seis meses de 2022 superan ya el total de ganancias registradas en todo el año anterior, cuando llegaron a 20.101 millones de dólares (19.692 millones de euros).
Las ganancias reflejan el aumento de precios y los mayores márgenes del refinado, compensados parcialmente por márgenes más bajos en su negocio de productos químicos.
Mientras, el ebitda ajustado se situó hasta junio en 42.177 millones de dólares (41.384 millones de euros), lo que supone un 69 % más que los 24.997 millones (24.521 millones de euros) de 2021.
Estos resultados han permitido entregar un dividendo para los accionistas de 0,25 dólares por participación en el segundo trimestre del año.
Shell anunció que el 5 de julio completó su programa de recompra de acciones para el primer semestre por valor de 8.500 millones de dólares y anunció otro para adquirir 6.000 millones de acciones en el tercer trimestre.
«Con la volatilidad de los mercados energéticos y la necesidad de actuar para abordar el cambio climático, 2022 sigue presentando enormes desafíos para consumidores, gobiernos y compañías», declaró el consejero delegado de Shell, Ben van Beurden.
El máximo responsable de la petrolera aseguró que van a usar su «fortaleza financiera» para «invertir en suministros energéticos seguros, dar pasos reales y valientes para reducir las emisiones de carbono y trasformar la compañía para un futuro de bajo carbono». EFE