Davos (Suiza), 17 ene (EFE). – La presidenta del banco español Santander, Ana Botín, no descarta que haya una recesión global en los próximos meses, si bien no cree que sea muy costosa en términos de empleo, ya que las tasas de paro en países como el Reino Unido, España o Portugal están en niveles históricamente bajos.
Durante un panel organizado por el Wall Street Journal en el Foro Económico Mundial de Davos, Botín no ha rechazado de plano la posibilidad de una recesión, pero ha destacado que los consumidores se han mostrado muy resistentes ante la crisis energética e inflacionaria provocada por la guerra en Ucrania.
Y ha destacado especialmente los razonables niveles de desempleo en los países donde opera el banco, aunque ha admitido que, «en lo más bajo de la piramide», los más vulnerables «sufrirán en mayor medida los efectos de la inflación»
Para los próximos doce meses, estima que el crecimiento global será ligeramente inferior al 3 %, aunque no igual en todas partes.
En el mercado inmobiliario, la presidenta del Santander prevé un ajuste, pero no una corrección, ya que la situación es mucho mejor que durante la anterior crisis, y aunque habrá «ajustes», no serán tan graves como en la crisis de 2007-2008
«El mundo necesita crecimiento», ha enfatizado Botin, que es lo que «paga los servicios sociales y la transición a energías verdes, la digitalización y la educación.
Y en ese ámbito Estados Unidos «nos lleva ventaja», particularmente en el sector bancario; ha advertido. El mercado estadounidense es homogéneo y no está fragmentado como el europeo, donde hay 27 sistemas regulatorios distintos, ha considerado.
Por lo que respecta a la transición energética, Botín está convencida de que hay que pasar «del marrón al verde», lo que supone «un reto y una oportunidad».
Europa -ha recordado- tiene en este asunto todas las cartas para culminar con éxito esta transición, y las empresas deben incentivar el cambio de comportamiento de los consumidores, contando con el respaldo financiero necesario. EFE
