Rusia descarta recortar producción de derivados de crudo por embargo de la Unión Europea

Moscú, 3 feb (EFE). – Rusia descartó hoy, al menos de momento, un recorte de la producción de derivados de petróleo debido a la entrada en vigor el próximo domingo del embargo de la Unión Europea (UE) a la importación de estos productos rusos.

«Cuando se aplique el embargo, veremos a qué conducirá. De momento no vemos fundamentos para considerar que disminuirán bruscamente el refinado y la producción de derivados de petróleo», dijo el ministro de Energía de Rusia, Nikolái Shulguínov, según la agencia Interfax.

Aseguró, además, que las autoridades rusas tampoco contemplan cambios en el plan de reparaciones de las refinerías del país debido al embargo comunitario, adoptado en el marco de las sanciones a Rusia por su campaña militar en Ucrania.

«Todo lo que se refiere a las reparaciones se programa con antelación, incluido los suministros de repuestos, por lo que por ahora no planeamos cambios», señaló Shulguínov.

En 2022 Rusia produjo 276 millones toneladas de derivados de crudo, un 3,5% menos que el año anterior, según la agencia federal rusa de estadísticas, Rosstat.

En particular, la producción de gasolina aumentó en un 3,6 % y fue de 42,3 millones de toneladas, mientras que la de diésel creció un 5,4 % y totalizó 84,7 millones de toneladas.

Además del embargo a las importaciones de derivados de petróleo rusos, la UE estudia la imposición de un precio tope a estos productos, como ya lo hizo con el crudo.

El embargo a las importaciones es una medida mucha más contundente que los precios del tope, dijo a EFE el experto en el sector petrolero y gasístico ruso Mijaíl Krutijin.

«Y es que si en el caso del crudo Rusia puede redirigir a Asia gran parte de los volúmenes que antes iban a Occidente, en el caso de los derivados de petróleo ello será muy difícil, ya que países como China, India o Corea del Sur cuentan con una importante industria de refinado y también son exportadores de productos petrolíferos», explicó.

La contracción del mercado para los derivados rusos, agregó el experto, tendrá un impacto sensible en la industria petrolera rusa, ya que obligará a reducir la producción y, en algunos casos, a paralizar refinerías.

Krutijin advirtió de que ello obligará a las petroleras a reducir las extracciones e incluso a cerrar pozos, que es un proceso de alto coste. EFE

Comentarios