Diego Ciongo: “Paraguay se encamina a liderar el crecimiento económico de América Latina en 2023”

Para finales de 2023, se espera que Paraguay tenga un incremento del PIB del 5,0%. El país tiene bases muy sólidas, posee un superávit de cuenta corriente, convergencia fiscal, ley de responsabilidad fiscal y fundamentos macroeconómicos estables.

Paraguay debe mejorar en el aspecto de la institucionalidad y la transparencia, manteniendo una lucha eficiente contra la corrupción para alcanzar el tan anhelado grado de inversión.

La puesta en marcha de la planta productora de celulosa de eucalipto de Paracel significará para Paraguay US$ 1.000 millones más en exportaciones por año. 

En la foto: Diego Ciongo, economista en Itaú BBA.

Para finales de 2023, se espera que Paraguay tengo un crecimiento económico del 5,0% y un tipo de cambio en G. 7.200 por dólar, con una recuperación de las cuentas externas. Si bien la inflación ha venido mostrando una trayectoria descendente, la convergencia a la meta está sujeta a eventuales riesgos que podrían derivarse de un panorama de elevada incertidumbre.

“Las proyecciones que se tienen para Paraguay son bastante buenas, en torno a 5,0% de incremento del PIB, puesto que se ve un año de buena cosecha, lo que significa un buen flujo de dólares evitando así la presión en el tipo cambio. Paraguay puede ser el país con mayor crecimiento de la región”, explicó Diego Ciongo, economista de Itaú BBA.

En el escenario regional se observa a Brasil creciendo en entorno a un 1,3%, Argentina actualmente se encuentra en recesión. Por su parte, Uruguay cuenta con tasas de interés muy elevadas y expectativas de crecimiento de 2,0%.

PLUS: ¿Cuáles son los factores que contribuyen a la expectativa de crecimiento de Paraguay para 2023?

Diego Ciongo: Los riesgos a la baja por la sequía disminuyen y asoma un alza en generación eléctrica por las binacionales Itaipú y Yacyretá dado el buen nivel de agua. Se espera una buena cosecha para 2023, pero sin representar números récords.

Así también, es importante resaltar que para los primeros 12 meses de la puesta en funcionamiento de la planta de celulosa de Paracel, se espera que represente un adicional de 1,5% del PIB, así como el 10% de todas las exportaciones de Paraguay.

En cuanto a inflación, vemos una caída bastante sostenida. En 2022 tuvimos una inflación elevada por el aumento de los precios del combustible. La buena noticia para Paraguay es que las expectativas de inflación que plantea el BCP ya están bien ancladas en un 4,0%.

PLUS: ¿Cómo evalúa los efectos de la dolarización de la deuda pública en el déficit fiscal de Paraguay?

Diego Ciongo: La tendencia y dolarización de la deuda pública son temas para seguir de cerca. El 90% de la deuda pública de Paraguay está nominada en moneda extranjera, por lo que es necesario que el próximo gobierno potencie el mercado de capitales para reducir la dolarización.

Paraguay tiene un nivel de deuda bajo, que representa 36% del PIB. Sin embargo, es importante resaltar el crecimiento de la deuda que años atrás era solo del 10% y al día de hoy se posiciona en más del 30%.

En lo que refiere al mercado cambiario, a finales de 2022 se observó una fuerte depreciación del guaraní frente al dólar. Sin embargo, es destacable que el Banco Central del Paraguay intervenga en el mercado siempre que sea necesario para evitar una volatilidad elevada.

PLUS: En año con una sequía del 70% y donde la bajante del río no favoreció una buena producción de energía eléctrica para exportar ¿cuál sería el plan B para que Paraguay no caiga en recesión?

Diego Ciongo: En 2022, Paraguay experimentó mucha dependencia de la lluvia a causa de la sequía y lo ideal sería no depender de este factor. Por esto, es indispensable avanzar en la diversificación de la economía.

Paraguay tiene bases muy sólidas, posee un superávit de cuenta corriente, convergencia fiscal, ley de responsabilidad fiscal y fundamentos macroeconómicos estables que deben ser aprovechados.

El país debe mejorar en el aspecto de la institucionalidad y la transparencia, manteniendo una lucha eficiente contra la corrupción para alcanzar el tan anhelado grado de inversión.

Del mismo modo, es importante destacar que la construcción de la planta de Paracel puede convertirse en una bisagra para Paraguay, entendiendo que este tipo de proyecto conlleva a volver atractivo al país. Solo esta industria productora de celulosa de eucalipto con plantaciones forestales, podría significar para Paraguay un aproximado de US$ 1.000 millones más en exportaciones, lo que representaría un 10% de las exportaciones totales.

PLUS: Paraguay está liderando actualmente el clima de negocios en América Latina con 162,3 puntos ¿Cómo observan desde Itaú esta situación y cómo le beneficia a Paraguay?

Diego Ciongo: El apetito internacional por Paraguay ha crecido significativamente en los últimos años.

Desde Itaú notamos este interés hacia Paraguay, sobre todo por parte de inversores institucionales del extranjero. Definitivamente el país debe seguir transitando por esta senda y diversificando su economía para alcanzar el grado de inversión.

ARGENTINA: UN ESCENARIO DESAFIANTE PARA FINALES DE 2023

En Argentina, la actividad se recuperó luego de la pandemia, pero después de la introducción de controles a las importaciones comenzó a retraerse.

La fuerte sequía que afecta al país llevaría a una significativa contracción del PIB. Combatir la suba de precios es cada vez más difícil. El IPC subió 6,0% en enero, se espera 6,4% para febrero y en torno a 7,0% para marzo.

El gobierno apunta a reducir la inflación a través de controles de precios en medio de un menor crecimiento. Sin cambios en las políticas macroeconómicas, lo más probable es que la inflación se mantenga alta, a más del 100% acumulada anual.

URUGUAY: TASAS MUY ELEVADAS

La economía uruguaya se recuperó fuertemente luego de la pandemia (4,4% por encima de los niveles prepandemia de acuerdo a las últimas cifras oficiales).

El país atravesará una fuerte sequía que afectará la economía en 2023. El Banco Central del Uruguay (BCU) subió la tasa de interés de 4,5% hasta 11,5% en diciembre de 2022 y las tasas de interés real-exante se ubican en torno al 5%.

En cuanto al tipo de cambio, el peso uruguayo se apreció un 10% ayudado por la IED y una política monetaria más restrictiva. Aun así, Uruguay demuestra una pérdida de competitividad respecto de Argentina y Brasil.

BRASIL: CRECIMIENTO DE 1,3% A FINALES DE 2023

Brasil sigue apuntando a un crecimiento débil en 2023. Sin embargo, los indicadores de actividad por cuenta propia mejoraron a principios de año y las perspectivas para la economía mundial son ligeramente más favorables.

El crecimiento del PIB proyectado para 2023 es de 1,3% desde 0,9%. La perspectiva es que este momento positivo sea temporal y que la economía retome la tendencia de desaceleración en los próximos meses.

Por su parte, la proyección de inflación para 2023 es de 6,3%, desde 5,8. Itaú Unibanco revisó su previsión para el próximo año a 4,2% desde 3,7%, con el impacto del debilitamiento de las expectativas de inflación. Un mayor desánimo y una eventual revisión del objetivo podrían impulsar la proyección de 2024 por encima del 5%.

PERFIL – DIEGO CIONGO

Economista en Itaú BBA. Encargado del seguimiento de la economía de Argentina, Paraguay y Uruguay, con base en Itaú Uruguay.

Anteriormente se desempeñó en el área de estudios macroeconómicos del Banco Central de la República Argentina (BCRA).

Es licenciado en comercio internacional por la Universidad Nacional de Quilmes (Argentina). Además, es magister en economía aplicada por la Pontificia Universidad Católica Argentina.

Diego Ciongo, economista en Itaú BBA; y Federico Arana, director de banca mayorista de Itaú Paraguay.
Comentarios