La inflación anual continuó cayendo ayudada por un efecto base favorable y menores precios de materias primas.
“El buen desempeño respalda nuestra previsión de crecimiento del PIB para este año de 5,0%”, según un reporte de Itaú Unibanco.
ESCENARIO MACRO – PARAGUAY
Crédito: Joao Pedro Resende, Diego Ciongo y Julio Ruiz. Departamento de Investigación Macroeconómica de Itaú Unibanco.
– El déficit fiscal se amplió en lo que va de 2023 y está lejos de la meta establecida para este año.
– En nuestra opinión, el deterioro de las cuentas públicas requerirá un control más estricto de los gastos para el resto del año.
– Vemos riesgos (mayor déficit) a nuestra proyección de balance fiscal nominal de -2,3% del PIB para 2023.
LA INFLACIÓN DE MAYO SORPRENDIÓ A LA BAJA
El IPC mensual registró una expansión prácticamente nula (desde 0,2% hace un año y mediana de 5 años de 0,2%), por debajo de nuestra previsión de 0,2% y consenso de mercado de 0,3% (según encuesta BCP). Los volátiles precios de las frutas y verduras (-1,4%) y la caída en los precios de los combustibles (-1,2%) presionaron a la baja en el mes. El IPC subyacente x1 (excluye frutas y verduras, precios de servicios regulados y combustibles) se situó en un 0,2 %, también suave (frente al 0,6% de hace un año y una mediana de 5 años del 0,5%).
Sobre una base interanual, la inflación general cayó a 5,1% en mayo (desde 5,3% en abril), mientras que el IPC subyacente X1 cayó a 6,2% (desde 6,6%).
TASA DE INTERÉS SIN CAMBIOS EN MAYO, SIN INDICIOS DE RELAJACIÓN MONETARIA EN EL CORTO PLAZO
El directorio del banco central del Paraguay (BCP) decidió por unanimidad mantener la tasa de política sin cambios en 8,50%, por octavo mes consecutivo. La decisión estuvo en línea con las expectativas del mercado (según la encuesta del BCP) y nuestra proyección. El BCP destacó que la inflación en abril (0,4%) estuvo en un nivel superior al consistente con la meta de inflación.
Además, mencionó que la volatilidad en la inflación se mantiene alta en comparación con los niveles previos a la pandemia, y reiteró que la convergencia a la meta está sujeta a riesgos potenciales que podrían derivar en un panorama de alta incertidumbre.
Finalmente, el BCP señaló que las expectativas de inflación para 2023 se mantuvieron en 5,0%, mientras que para el horizonte de política monetaria relevante (18-24 meses) se ubicaron en 4,0%. Así, la tasa de política real ex ante se mantuvo sin cambios en 4,5% en mayo (utilizando expectativas para el horizonte de política monetaria), frente a un rango de tasa real neutral de 0,9%-1,4% estimado por el BCP.
MOMENTO POSITIVO DE LA ACTIVIDAD
El proxy mensual del PIB (IMAEP) aumentó 6,0% interanual en abril (desde 8,6% en marzo), llevando la tasa anual trimestral a 6,9% (desde 6,1% en 1T23). La actividad fue apoyada por el sector agrícola, la generación eléctrica (reflejando una mejora en el caudal del río Paraná), la producción manufacturera y el sector servicios.
Por otro lado, la construcción y la ganadería frenaron el crecimiento general de la actividad. El IMAEP excluyendo agricultura y binacionales aumentó a un ritmo más suave de 0,7% en abril, llevando la tasa anual trimestral también a 0,7% (desde una expansión prácticamente nula en el 1T23). Usando series desestacionalizadas, el IMAEP cayó 2,6% mensual en abril, llevando la tasa de crecimiento anualizada trimestral a 9,7% en abril (desde 10,7% en el 1T23).
DETERIORO DE LAS CUENTAS FISCALES
El déficit fiscal acumulado de 12 meses estimado alcanzó 3,6% del PIB en mayo, muy por encima del 3,0% registrado en 2022. Los ingresos totales cayeron 1,7% interanual en términos reales en el trimestre finalizado en mayo, luego de caer 7,2% en el 1T23. El gasto primario aumentó 10,9% interanual en el mismo período (vs. 6,3% en 1T23), impulsado por los gastos sociales y de capital. Una deuda no registrada con constructoras y empresas farmacéuticas en torno al 1,0% del PIB es otro riesgo para el panorama fiscal.
CONSOLIDACIÓN FISCAL DESAFIANTE
El buen desempeño de los indicadores adelantados de actividad respalda nuestra previsión de crecimiento del PIB para este año de 5,0%, reflejando la normalización del sector primario tras la severa sequía del año pasado.
Mantuvimos nuestro pronóstico de inflación para fines de este año en 5,0%, ayudados por precios más bajos de las materias primas y una postura de política monetaria estricta. Nuestra tasa de política de fin de año también se mantiene en 7,50%, con recortes de tasas probables desde el 3T23.
Vemos riesgos (mayor déficit) para nuestra previsión de saldo fiscal nominal de -2,3% del PIB para 2023 (también el objetivo oficial incluido en el presupuesto general). El deterioro del déficit en lo que va del año probablemente requerirá un control más estricto de los gastos para el resto del año. La deuda no registrada mencionada anteriormente suma una presión adicional para el frente fiscal.
Estudio macroeconómico – Itaú
Mario Mesquita – Economista Jefe