El país cuenta actualmente con un mercado en constante crecimiento, con una demanda creciente de viviendas y espacios comerciales.
Ofrece estabilidad económica, clima favorable para los negocios, régimen tributario competitivo, inflación controlada y disciplina fiscal.
Asunción (Paraguay), 11 oct. (PLUS).- El evidente crecimiento del mercado inmobiliario paraguayo se debe a una serie de factores. Entre ellos destaca el notable crecimiento económico del país, que lleva a un aumento en la demanda de viviendas y espacios comerciales.
Así mismo, influye la estabilidad política y social de Paraguay, que lo convierte en un destino atractivo para la inversión extranjera.
Otro factor que hace de Paraguay un potencial hub para la inversión inmobiliaria, es la ubicación estratégica, que le permite presentarse como un centro comercial y logístico para la región.
“Paraguay tiene muchos atractivos para los inversionistas. Por un lado, los bajos impuestos como el IVA y el impuesto a la renta, así como inflación de un digito, el dólar estable, la facilidad de realizar inversiones sin trabas para extranjeros, son algunos de los más destacados. Por otro lado, pero no menos influyente, Paraguay se ve favorecido por la situación económica y política de los países de donde proviene la mayoría de los inversores”, explicó Raúl Constantino, presidente de la Cámara Paraguaya de Desarrolladores inmobiliarios del Paraguay (Capadei) y empresario del sector inmobiliario.
Raúl Constantino aseguró además que el crecimiento del mercado inmobiliario en Paraguay en los últimos años es fruto del trabajo de los desarrolladores locales que apostaron a este sector aun con muchas condiciones desfavorables.
“Los inversores paraguayos lograron impulsar un rubro pujante para el desarrollo económico. La industria inmobiliaria, así como se la ve hoy, en constante crecimiento y generando importantes volúmenes de unidades, comenzó aproximadamente hace 9 años atrás, gracias a estos desarrolladores locales que apostaron al mercado”, enfatizó.
OPORTUNIDADES Y DESAFÍOS
Las oportunidades en Paraguay para los inversores inmobiliarios son numerosas. El país ofrece un mercado en constante crecimiento, con una demanda creciente de viviendas y espacios comerciales.
Otra oportunidad resaltante es la estabilidad económica, además del clima favorable para los negocios, precios y régimen tributario competitivo, inflación controlada y disciplina fiscal.
Sin embargo, también existen algunos desafíos que los inversores deben considerar. Uno de los principales es la falta de infraestructura en algunas zonas del país y la falta de oportunidades laborales que puede verse mermada con mayor inversión por parte de industrias y empresas extranjeras.
“Los desafíos son muchos, desde generar un producto adecuado a las posibilidades de la población, como el de mantener la salud del sector, basada en la confianza que tienen los compradores en los desarrollos en pozo. Debemos hacer hincapié también en el cuidado de los desarrollos que se realizan y ofertan, teniendo en cuenta el respaldo que estos tienen, a fin de no destruir un valor fundamental: la confianza”, destacó Raúl Constantino.
Así también, algunas de las tendencias que están moldeando el mercado inmobiliario paraguayo son el aumento de la demanda de vivienda asequible y la inversión en desarrollos sostenibles.
Al respecto, Raúl Constantino manifestó, “Cuando enumeramos las condiciones desfavorables, podemos citar un escaso o casi nulo crédito hipotecario, así como la altísima burocracia de las instituciones públicas, la falta de inversión en infraestructura por parte de los municipios y el Estado, entre otras”.
Según una publicación de DFSUD (Chile), durante las últimas dos décadas, Paraguay ha estado trabajando en su desarrollo y en atraer nuevas inversiones. Medidas de intercambio favorables impulsaron los precios de los productos de exportación y el país empezó a mostrar una macroeconomía más sólida, estable y segura para inversionistas extranjeros.
Una de las industrias que más se ha potenciado en los últimos años es la inmobiliaria. El mercado muestra muchos cambios y avances interesantes, principalmente gracias a la aparición de un abanico de ofertas que se ajustan a todas las necesidades y posibilidades de la población.
“Hoy en día contamos con desarrollos para todos los bolsillos y en diferentes ciudades del país. El sector hizo la tarea, generar productos para todos. Más que nunca, es fundamental que el gobierno y las municipalidades hagan lo suyo”, finalizó Raúl Constantino.
DESTRONANDO A URUGUAY
El artículo de DFSUD destacó que años atrás el atractivo hacia el mercado inmobiliario estaba centrado en Uruguay. Pero ese mercado se ha tornado más conservador y además se ha hecho un poco caro en dólares en comparación con otros países latinoamericanos.
A esto hay que sumar que las presiones inflacionarias y las devaluaciones de las monedas, un común denominador en gran parte de la región, pero que puede ser aprovechado para la inversión en dólares de rentas altas.
Paraguay ofrece estabilidad, poca inflación, reglas claras, continuidad y previsibilidad de la inversión. Por ejemplo, en el país la oferta hotelera no está tan desarrollada.
Pero el mercado no solo se ha reacomodado en la región, sino también dentro del mismo Paraguay. Hasta hace unos años, los argentinos eran los principales inversionistas en ese mercado, pero hoy son superados por los brasileños, quienes están aprovechando la ley de maquila, que les permite producir cierto porcentaje de los productos y reexportar con un régimen tributario que no les afecta impositivamente.
En paralelo, el interés desde Chile también ha venido creciendo durante los últimos años. Hasta 2021 se hablaba que los chilenos estaban invirtiendo alrededor de US$ 300 millones en Paraguay.
La tendencia va de la mano de la previsibilidad económica y de gobierno, y acompañada de la posibilidad de invertir y tener retorno en dólares en aproximadamente un 5% a 6% anual de la inversión; y una valoración por plusvalía del 10% al 20%, dependiendo en qué zona de Paraguay se encuentre la propiedad.
Es decir, en Paraguay la tierra aumenta su valor en un 10% anual, sobre su valor real. El interés también ha llegado de Bolivia, Perú y otros países extrazona que no eran frecuentes, como Portugal o Alemania.
En el área residencial las zonas con mayor foco son Asunción y Gran Asunción. En cuanto a logística, Ciudad del Este y Hernandarias se han convertido en las ciudades receptoras, especialmente luego de que Brasil asumiera al mercado paraguayo como su centro de distribución.
En el caso de las primeras urbes, se están invirtiendo cerca de US$ 2.000 millones en desarrollos inmobiliarios, cifra que en los próximos años esperan que crezca a unos US$ 3.000 millones. De ese monto, el 30% es inversión extranjera, equivalente a unos US$ 900 millones.

