El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) en Paraguay se ubicó en 53,5 en marzo de 2024, según el informe publicado por el Banco Central del Paraguay (BCP).
Aunque disminuyó respecto al mes previo, el indicador se mantiene en zona de optimismo por décimo sexto mes consecutivo, reflejando una buena predisposición de los consumidores.
El Banco Central del Paraguay (BCP) ha dado a conocer los resultados del Índice de Confianza del Consumidor (ICC) correspondientes al mes de marzo de 2024. Según el informe, el ICC registró un nivel de 53,5, lo que lo ubica por encima del resultado de marzo del año anterior (52,1), aunque inferior al valor del mes previo (56,4).
El ICC es un promedio simple del Índice de Situación Económica (ISE) y del Índice de Expectativa Económica (IEE). En marzo de 2024, el ISE presentó un valor de 39,3, superior en 3,1 puntos al valor registrado en marzo del año pasado, pero inferior en 2,8 puntos con respecto a febrero de 2024. Por su parte, el IEE alcanzó un resultado de 67,6, ligeramente inferior al índice de marzo de 2023 y al dato de febrero de este año.
En cuanto a la predisposición a ahorrar de los hogares, el porcentaje de personas que respondieron tener la posibilidad de ahorrar se ubicó en 22,5%. Este resultado fue superior respecto a marzo de 2023 en 4,5 puntos porcentuales, manteniéndose constante con respecto al mes anterior.
Respecto a la adquisición de bienes durables, el informe muestra incrementos en términos mensuales e interanuales en el porcentaje de personas que manifestaron que fue un buen momento para la compra de electrodomésticos, motos, autos y casas. En marzo de 2024, el 9,3% de los encuestados consideró que era un buen momento para adquirir electrodomésticos, el 6,5% para comprar una casa, el 6,8% para adquirir un automóvil y el 6,5% para la compra de una motocicleta.
Según los analistas del BCP, el mantenimiento del ICC en zona de optimismo por décimo sexto mes consecutivo refleja una buena predisposición de los consumidores y una confianza en la situación económica actual y las expectativas futuras. Esto se suma a los indicadores positivos observados en el mercado laboral y el crecimiento real del ingreso, lo que impulsaría el consumo de los hogares en los próximos meses.