Roma, 25 may (EFE).- Los ministros de Economía de los países del G7 exigieron a Israel mantener los lazos de su sistema bancario con los bancos palestinos para evitar un mayor deterioro de la economía palestina y su aislamiento financiero a nivel mundial, en el documento final publicado tras su reunión ne Italia.
«Instamos a Israel a tomar las medidas necesarias para garantizar que los servicios bancarios corresponsales entre los bancos israelíes y palestinos sigan funcionando, de modo que sigan las transacciones financieras vitales, el comercio y los servicios críticos», dijeron los ministros del G7 en un documento conjunto con conclusiones de la reunión tras la cumbre de Stresa, a orillas del Lago Mayor.
Esta declaración se produce después de que el ministro de Finanzas israelí, el ultraderechista Bezalel Smotrich, asegurara que busca adoptar más pasos punitivos contra la Autoridad Nacional Palestina (ANP), con poder limitado en Cisjordania ocupada y principal actor e interlocutor palestino reconocido ante la comunidad internacional.
Smotrich ha pedido adoptar más medidas de castigo contra la ANP que incluyen recortar aún más los fondos que Israel entrega a la ANP por los impuestos que recauda en su nombre, y suspender un punto clave del pacto de cooperación económica de Israel con la ANP en virtud los acuerdos de Oslo, por el cual bancos israelíes actúan como entidades bancarias corresponsales para bancos palestinos.
La economía palestina de Cisjordania y Gaza sigue dependiendo del shéquel, la moneda israelí, y dos grupos bancarios de Israel -Banco Hapoalim e Israel Diskount Bank- ejercen de canal financiero y hacen transacciones comerciales para los bancos palestinos.
La declaración del G7 va en línea con el llamamiento del jueves de la secretaria del Tesoro de EEUU, Janet Yellen. Esta criticó a Israel por sus medidas que «amenazan la estabilidad económica» de territorio palestino y advirtió contra la amenaza de Smotrich de no renovar la exención bancaria que permite las transacciones a la banca palestina.
En su documento de este sábado, el G7 también pide a Israel que desbloquee «los ingresos retenidos por concepto de liquidación a la Autoridad Palestina, en vista de sus urgentes necesidades fiscales».
A su vez, pide el alivio de otras medidas restrictivas que afectan «negativamente el comercio para evitar exacerbar aún más la situación económica» de Cisjordania ocupada, en un estado precario que se vio agravado por la guerra en Gaza que ha conllevado una fuerte caída.
«Mantener la estabilidad económica en Cisjordania también es fundamental para la seguridad regional», alertan los ministros de Economía de las siete democracias más industrializadas (Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Italia, Alemania y Japón).
Por otro lado, también se mostraron «profundamente preocupados por la devastadora y creciente crisis humanitaria en Gaza».
«Se necesita acción urgente, seguiremos cooperando para brindar asistencia humanitaria vital a los palestinos necesitados y brindando apoyo a los civiles y las economías de la región que se ven afectadas negativamente por el conflicto y sus efectos colaterales», dijeron.
Asimismo, alertaron del peligro de «una escalada regional» y de las «interrupciones en el transporte marítimo internacional» que se han producido en el mar Rojo por los ataques de los hutíes de Yemen, y instaron de nuevo «a la estabilidad en la región en general». EFE