Pekín, 5 jun (EFE).- China ha instado este miércoles a la Unión Europea (UE) a «mantener sus compromisos con el libre comercio» y ha advertido de que cualquier medida que «perjudique» la cooperación económica y comercial entre ambas partes no quedará sin respuesta.
La portavoz de la Cancillería china Mao Ning ha declarado hoy en rueda de prensa que la postura de este país respecto a las investigaciones y aranceles europeos ha sido «clara y constante».
Mao ha avisado de que China «no permanecerá pasiva ante cualquier medida que pueda dañar las relaciones comerciales y económicas entre China y la UE», y de que «tomará todas las medidas necesarias para defender sus legítimos derechos e intereses».
«Creemos que el proteccionismo comercial no beneficia a ninguna de las partes», ha añadido.
La portavoz respondía así a una pregunta acerca del reciente viaje a Europa del ministro chino de Comercio, Wang Wentao, que se produce en un momento de tensiones entre Bruselas y Pekín a cuenta de asuntos como los vehículos eléctricos chinos.
El titular chino de Comercio pidió en España al ministro español de Industria y Turismo, Jordi Hereu, que Madrid presione a UE para que el entorno de cooperación en «nuevas energías» sea «justo, predecible y no discriminatorio» ante las investigaciones a los eléctricos chinos por parte del Ejecutivo comunitario.
Wang pidió que España «anime» a la UE a «apoyar y alentar» ese sector «desde la perspectiva de los esfuerzos globales para afrontar conjuntamente el cambio climático y la situación general de la asociación estratégica integral China-UE».
«China valora altamente el apoyo de España a la participación activa de las empresas chinas en el proceso español de reindustrialización», indicó el ministro, que precisamente visitó la nueva fábrica de ensamblaje de vehículos de la china Chery en Barcelona.
Bruselas abrió en octubre una investigación a las subvenciones públicas que Pekín otorga a los eléctricos, que permiten «inundar» los mercados globales con vehículos de precio «artificialmente bajo» -algo que ya se había denunciado en el pasado con respecto al aluminio o al acero por un exceso de capacidad-, decisión protestada por Pekín, que la calificó de «proteccionismo descarado».
Wang reiteró este lunes que esa investigación es «un ejemplo típico de proteccionismo» y que las acusaciones de exceso de capacidad responden a la «ansiedad», calificando asimismo las de distorsión de mercado de «distorsión de la mentalidad».
Se espera que la decisión final sobre estas investigaciones se conozca tras la celebración de las elecciones europeas de esta semana.
En las últimas semanas, Pekín ha elevado la presión contra Bruselas por este asunto, avanzando posibles aranceles contra vehículos de gran cilindrada importados o una investigación ‘antidumping’ al cerdo europeo, algo que afectaría especialmente a España, principal exportador de esta carne a China entre los Veintisiete. EFE