Comercios se convierten en prácticos puntos para recarga de saldo de telefonías

El aumento del uso de los smartphones obliga tanto a comercios de alta y pequeña envergadura a adaptarse a las constantes demandas del cliente. Por ello, gracias a la tecnología del pos y minipos, la venta de saldo para celulares es un servicio que se ofrece a los usuarios de todas las telefonías móviles de Paraguay.

El servicio de venta de saldo, aparte de ofrecer a los comercios un porcentaje de ganancia por recargas, constituye “un gancho” para que los clientes se queden en el comercio a adquirir otros productos de su necesidad.

Nery Viveros, propietario de un local comercial que cuenta con el servicio de recarga de saldo, indicó que existe una buena demanda de clientes que ingresan al local para solicitar el servicio.

“Por medio de la venta de saldo, los clientes pueden fijarse en otros productos de sus necesidades y de esta forma generar más ingresos para su negocio”, dijo.

Gualdir Jara, también propietario de un microemprendimiento, destacó la funcionalidad del servicio y afirmó que facilita la captación de clientes que poseen tarjetas, ya sea de débito como de crédito.

“Existe un flujo importante de clientes que vienen a solicitar el servicio de carga de saldo, la demanda siempre está en crecimiento porque el celular es más que un lujo; es una necesidad para mantenernos comunicados”, expresó el emprendedor.

Todos los comercios que transaccionan con los sistemas de pos o minipos, pueden contar con este servicio, sin abonar ningún costo adicional por el servicio. Los clientes pueden acceder al servicio de recarga de saldo con tarjetas de débito y crédito.

Entre los beneficios de la carga de saldo, podemos mencionar: más ingresos para el comercio por la alta demanda de este servicio, acepta todas la tarjetas crédito o débito. Además el emprendedor puede estar tranquilo con más seguridad al no manipular efectivo.

Para más información, los interesados pueden llamar al *288 desde el Personal o Tigo, o al 0800 11 80 11 desde la línea baja.

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